Giorgio Armani |
Hoy he vuelto a discutir con mi hermana, y como siempre ha sido una discusión muy acalorada, con gritos, reproches, dolor...
Tengo mucho miedo de perderla y por primera vez creo que no voy a poder recuperarme con el paso de las horas y de los días como en otras ocasiones. Incluso se lo he dicho a ella, creo que voy a necesitar ayuda psicológica, no sé cómo explicarlo, es de esas veces que por necesidad algo en tu mente cambia, has recibido una información, o mejor dicho una verificación de cosas que ya sabías, y ese dato ha hecho que tomen sentido juntas. Pero ese sentido es contrario al que creías antes, la verdad, sea cual sea el motivo es que mi hermana y yo no sentimos lo mismo la una por la otra.
¿La culpable? Quizás yo... ¿La víctima? quizás ella. Y el resultado hoy es que ambas estamos sin conexión, la sangre, el pan y el agua no son suficiente. Hoy se ha ido diciendo que no volverá para no tener que verme. Otras veces ha dicho cosas parecidas y no ha pasado nada, pero hoy es distinto, yo quiero volver a verla, pero puede que a fuerza de repetirlo, yo misma crea que es lo mejor, aunque no puedo creer que esta situación haya llegado a estos puntos.
Ella dice que yo era la hermana dominante y que ha tenido que amoldarse a demasiadas cosas. Éramos niñas, es en lo único que puedo escudarme, en mi inconsciencia, sin embargo no podría utilizar en mi defensa un comportamiento impecable. También podría recurrir a que hace mucho tiempo y ha prescrito, pero esto no es un juzgado y yo misma sería la primera que agacharía la cabeza y aceptaría el castigo por cualquier cosa hecha en cualquier momento de nuestra infancia, puede que precisamente sea este.
Quiero a mi hermana, y si me diera la oportunidad de hablar por última vez para decidir romper, le pediría perdón por cada cosa mala que le he hecho y le daría mil gracias por las cosas buenas que me ha dado ella.
¿Qué puedo hacer? ¿Hundirme en la culpabilidad por haber sido una niña mala? Estábamos juntas todo el día, éramos las hermanas perfectas, no nos hacía falta ni hablar, estábamos conectadísimas. El roce hace el cariño... y a veces heridas.
Haría lo que fuera por tener algo bonito con ella. Ir a un psicólogo juntas, pero sé que ella no aceptaría, sin embargo yo sé que nosotras solas no vamos a poder arreglarlo. Y yo quiero arreglarlo con todas mis fuerzas, hasta que no vuelva a hablar con mi hermana... seguiré sintiendo ansiedad, como llevo estas horas desde que se ha ido.