La punta del zapato: diciembre 2012
DIARIO DE UNA ACOMPAÑANTE DE LUJO DE MADRID

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jueves, 6 de diciembre de 2012

Contestando preguntas (5)

Chanel

La última tanda de preguntas y respuestas.

  • ¿Cómo se negocia el sexo?
Yo le pregunto al cliente qué quiere hacer, y si quiere sexo, quiero saber qué clase de sexo y a dónde vamos a ir. Es mejor saber cuánto más detalles mejor, y no sólo por ti, a él le conviene también que vayas lista para llevar una "inciativa" pactada de ante mano para no encontrarse con topes inesperados o sorpresas. Aunque yo voy preparada para absolutamente todo. 
Si te piden una cita y surge el sexo, puedes recordarle que eso aumenta el precio y si no recuerda cuánto es, pues se lo dices, hay momentos en los que no puedes andar fingiendo que no eres prostituta. Y en el caso de que no tengas ganas, tiempo o lo que sea, basta con decir que eso no estaba pactado.
En cuestión de negociar el sexo lo tenemos más fácil nosotras que las novias normales. Es todo cuestión de dinero, más dinero significa más permisos, también deberías tener eso claro si vas a atreverte a pedir más de 500€ por cita más 200€ más si hay sexo.


  • ¿Pones límites en el sexo? 
La mente de un hombre es súmamente imprevisible, y nosotras, las escort somos aquellas que ponemos nuestros cuerpos al servicio de sus fantasías, pero muchas veces esas fantasías son auténticas pesadillas, y algunas jamás podrías haberlas previsto ni viviendo quinientos años.
Ten en cuenta que todos aquellos que tengan un fetiche rebuscado e inconfesable van a recurrir a chicas de compañía. Y muchos pueden acceder a una de lujo con toda tranquilidad, no creas que los fetiches más siniestros se limitan a clases deprimidas. Los ricos también tienen mentes retorcidas.
Si quieres dedicarte a esto tienes que estar preparada para oír de todo, pero sobretodo tienes que estar preparada para ser tolerante, no estoy diciendo que tengas que ceder, pero si a escuchar, a ser educada y a no juzgarles, y sobretodo dedicarte una tarde a discernir muy bien lo simplemente inmoral de lo que sobrepasa esa línea y se convierte en ilegal. A los ilegales no se les tolera, se les denuncia, estoy pensando en violadores, pedófilos, maltratadores... 
La moralidad es algo muy subjetivo y cada uno tiene la suya, para mí si algo no perjudica a nadie o si lo hace es con total consentimiento... no es inmoral, y aunque es un tema complicado porque hay miles de casos excepcionales, espero que queráis entender lo que digo. 
Soy escort, evidentemente no soy quien para hablar de moralidad, pero la tengo, todos la tenemos, para unos es algo restrictivo y rígido, para otros es flexible, más abierta... no sé. Algún día hablaré de ello, es un tema muy complejo para meterlo en esta respuesta.
Pongo límites en el sexo, obligo a usar condón, incluso para las felaciones, no dejo que me peguen, ni que me tiren del pelo, aunque si me piden que yo les pegue lo hago. Tampoco recibo lluvia dorada (pis, para los despistados) pero lo doy si me lo suplican. Y muchos más límites con palabras muy desagradables y significados aún peores que no quiero que se os pasen por la imaginación, concentraos en el color rosa de mi blog y pasemos a la siguiente pregunta.


  • ¿Cómo se pide el dinero? 

Yo creo que ya hablé de ello en otro post. Es muy complejo, por una parte una trata de hacer que el cliente se olvide de que todo se reduce a un negocio frío y sin sentimientos, pero también es muy tenso pensar que aún no se tiene el dinero en la mano y pueden traicionarte.
Si empieza la juerga, sobretodo cuando es sexo, y no me han dicho dónde está el dinero o me lo han dado ya... pregunto. Y yo suelo ser muy graciosilla, ¿dónde está el dinero para mis zapatos nuevos? - digo por ejemplo. O ¿Y el dinero para nuestra cuenta conjunta?- chorradas. Pero se puede ser clara, no hay que ser humorista si no es lo tuyo, jaja.
Me consta que a ellos también les cuesta decidir cuándo es el momento de pagar y cómo hacerlo, es una incomodidad recíproca. 
Los elegantes lo dejan en un mueble, en la mesilla y uno me lo dejó en un sobre en el baño con rosa... 
No siempre soy atrevida, y a veces me da apuro pedirlo, y acaba el trabajo y tengo que simplemente esperar que no me la jueguen, por suerte no me ha pasado, me han pagado sin problemas, y lo bueno de cobrar al final es que siempre se les escapa una propina.
A los clientes fieles les cobro al final, aunque también es algo que se puede pactar, algunos me han dado la mitad primero y la mitad después, no sólo los clientes traicionan, algunas chicas seguro que también.

Y ya no hay más preguntas! Si queréis contactar para preguntarme algo como esta lectora, no lo dudéis, quizás estos últimos post os ha generado otras dudas.

Por favor no interpretéis todo esto como una incitación a la prostitución, no me gustaría dar la impresión de estar haciendo un manual para ser puta. Aunque espero que sea útil lo que más deseo es que sea entretenido e interesante para todo tipo de lectores.


miércoles, 5 de diciembre de 2012

Contestando preguntas (4)

Chanel

La última tanda de preguntas y respuestas.

  • ¿Cómo se negocia el sexo?
Yo le pregunto al cliente qué quiere hacer, y si quiere sexo, quiero saber qué clase de sexo y a dónde vamos a ir. Es mejor saber cuánto más detalles mejor, y no sólo por ti, a él le conviene también que vayas lista para llevar una "inciativa" pactada de ante mano para no encontrarse con topes inesperados o sorpresas. Aunque yo voy preparada para absolutamente todo. 
Si te piden una cita y surge el sexo, puedes recordarle que eso aumenta el precio y si no recuerda cuánto es, pues se lo dices, hay momentos en los que no puedes andar fingiendo que no eres prostituta. Y en el caso de que no tengas ganas, tiempo o lo que sea, basta con decir que eso no estaba pactado.
En cuestión de negociar el sexo lo tenemos más fácil nosotras que las novias normales. Es todo cuestión de dinero, más dinero significa más permisos, también deberías tener eso claro si vas a atreverte a pedir más de 500€ por cita más 200€ más si hay sexo.


  • ¿Pones límites en el sexo? 
La mente de un hombre es súmamente imprevisible, y nosotras, las escort somos aquellas que ponemos nuestros cuerpos al servicio de sus fantasías, pero muchas veces esas fantasías son auténticas pesadillas, y algunas jamás podrías haberlas previsto ni viviendo quinientos años.
Ten en cuenta que todos aquellos que tengan un fetiche rebuscado e inconfesable van a recurrir a chicas de compañía. Y muchos pueden acceder a una de lujo con toda tranquilidad, no creas que los fetiches más siniestros se limitan a clases deprimidas. Los ricos también tienen mentes retorcidas.
Si quieres dedicarte a esto tienes que estar preparada para oír de todo, pero sobretodo tienes que estar preparada para ser tolerante, no estoy diciendo que tengas que ceder, pero si a escuchar, a ser educada y a no juzgarles, y sobretodo dedicarte una tarde a discernir muy bien lo simplemente inmoral de lo que sobrepasa esa línea y se convierte en ilegal. A los ilegales no se les tolera, se les denuncia, estoy pensando en violadores, pedófilos, maltratadores... 
La moralidad es algo muy subjetivo y cada uno tiene la suya, para mí si algo no perjudica a nadie o si lo hace es con total consentimiento... no es inmoral, y aunque es un tema complicado porque hay miles de casos excepcionales, espero que queráis entender lo que digo. 
Soy escort, evidentemente no soy quien para hablar de moralidad, pero la tengo, todos la tenemos, para unos es algo restrictivo y rígido, para otros es flexible, más abierta... no sé. Algún día hablaré de ello, es un tema muy complejo para meterlo en esta respuesta.
Pongo límites en el sexo, obligo a usar condón, incluso para las felaciones, no dejo que me peguen, ni que me tiren del pelo, aunque si me piden que yo les pegue lo hago. Tampoco recibo lluvia dorada (pis, para los despistados) pero lo doy si me lo suplican. Y muchos más límites con palabras muy desagradables y significados aún peores que no quiero que se os pasen por la imaginación, concentraos en el color rosa de mi blog y pasemos a la siguiente pregunta.


  • ¿Cómo se pide el dinero? 

Yo creo que ya hablé de ello en otro post. Es muy complejo, por una parte una trata de hacer que el cliente se olvide de que todo se reduce a un negocio frío y sin sentimientos, pero también es muy tenso pensar que aún no se tiene el dinero en la mano y pueden traicionarte.
Si empieza la juerga, sobretodo cuando es sexo, y no me han dicho dónde está el dinero o me lo han dado ya... pregunto. Y yo suelo ser muy graciosilla, ¿dónde está el dinero para mis zapatos nuevos? - digo por ejemplo. O ¿Y el dinero para nuestra cuenta conjunta?- chorradas. Pero se puede ser clara, no hay que ser humorista si no es lo tuyo, jaja.
Me consta que a ellos también les cuesta decidir cuándo es el momento de pagar y cómo hacerlo, es una incomodidad recíproca. 
Los elegantes lo dejan en un mueble, en la mesilla y uno me lo dejó en un sobre en el baño con rosa... 
No siempre soy atrevida, y a veces me da apuro pedirlo, y acaba el trabajo y tengo que simplemente esperar que no me la jueguen, por suerte no me ha pasado, me han pagado sin problemas, y lo bueno de cobrar al final es que siempre se les escapa una propina.
A los clientes fieles les cobro al final, aunque también es algo que se puede pactar, algunos me han dado la mitad primero y la mitad después, no sólo los clientes traicionan, algunas chicas seguro que también.

Y ya no hay más preguntas! Si queréis contactar para preguntarme algo como esta lectora, no lo dudéis, quizás estos últimos post os ha generado otras dudas.

Por favor no interpretéis todo esto como una incitación a la prostitución, no me gustaría dar la impresión de estar haciendo un manual para ser puta. Aunque espero que sea útil lo que más deseo es que sea entretenido e interesante para todo tipo de lectores.


martes, 4 de diciembre de 2012

Contestando preguntas (3)

Aperlaï

Vuelvo al blog para seguir respondiendo preguntas a la lectora, aunque... con el tiempo que dejo pasar de post a post y el tiempo que tardé en ponerme a responderle, quizás ya pueda ofrecer su experiencia personal y sea ya una profesional.

  • ¿Es seguro ir a casas de los clientes o es mejor ir sólo a hoteles?
Yo voy a la casa de los clientes, y no me da especialmente miedo dependiendo de la casa, la zona y el cliente en sí. Gente mala hay en todos lados, pero tienes un dato muy importante, su dirección.  Lo mismo que en el hotel, dónde para registrarse han tenido que identificarse. 
Es muy duro decirlo y admitirlo, pero este trabajo es arriesgado y una tiene sus derechos y ahí está la policía para denunciar, pero... al final has sido tú la que te has metido en la boca del lobo. Si tu ojo funciona bien o si simplemente tienes buena suerte no tiene porque pasar nada... pero la realidad es la realidad, ellos son más fuertes que tú al menos en el cuerpo a cuerpo. 
A mí no me ha pasado nada grave, algún pesado... algún señor extraño... algún mentiroso... pero nadie realmente malo. (Toco el tacón de madera de una de mis botas).

  • ¿Dejas que el cliente te lleve de vuelta a casa? 
La respuesta es sí, o más bien "casi sí", porque no suelo pedirles que me dejen en el portal, por lo general me dejan en la esquina de la siguiente calle a la mía. Es el punto que he elegido porque no hay modo de que le resulte fácil seguirme por la dirección del tráfico. 
Quizás la pregunta pueda ser respondida también en el caso de que vaya andando, hay que ser un poco más creativa, preguntándole dónde va él y creando un punto de despedida en el cual toméis caminos diferentes. Como siempre hay que ir con cuidado, pero no hay que volverse paranoica y vigilar tus espaldas cada tres pasos, quizás sólo cada veinte, jaja. O simplemente te despides cuando veas oportuno y dices que no hace falta que te acompañe hasta el portal, si el hombre es normal lo aceptará sin más y si es listo hasta entenderá que lo haces por guardar en secreto tu dirección. 

  • ¿Usas tu nombre real o un seudónimo? 
Uso un nombre falso, y hay varias razones por las que no me gusta usar el mío. 
Supongo que la primera es evitar una relación directa con mi verdadera identidad, porque al final casi todas hacemos esto en secreto. El nombre es una capa más de nuestro disfraz para pasar desapercibidas entre nuestro entorno privado.
La segunda razón es la faceta de actriz de las prostitutas, y como actriz tomas el papel correspondiente en cada momento, yo empecé con un seudónimo ahora tengo tres y he tenido cuatro. Uno para el perfil de lujo, otro para el perfil más sexual y otro para el de mercadillo (como yo le llamo), y al igual que los nombres, tengo ropa diferente para cada faceta mía (porque al final todas soy yo pero en diferentes circunstancias). Son cosas que una va adquiriendo con el tiempo y que no piensa al principio, yo empecé con un sólo seudónimo y un sólo tipo de perfil.

  • ¿Tienes un móvil de trabajo y otro personal? 
 Esta respuesta podría ser más o menos la anterior. Tengo un número de móvil para cada uno de mis papeles. Concretamente mi número personal y el de lujo están ambos en un aparato, y el de chica sexy más el de chica amateur son el mismo y están en otro móvil, con forma de polvera... más de puti... jajaja. La polvera (que nombre más apropiado ahora que lo veo escrito) sólo la abro en ciertos horarios y a veces me he confundido creyendo que me llaman por un perfil y en realidad era por el otro, debería tenerlos separados, pero siempre pienso que el de "amateur" tiene los días contados y no le hago otro número... pero es que a veces son clientes majos y fáciles, y 80 o 100 eurillos por unos achuchones inocentes...

Mañana más preguntas y más respuestas. Quién dice mañana, queriendo decir realmente mañana, dice en 2013. Pero trataré que no pase más de una semana.
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