A la guerra por Lanvin

Psicosis es la palabra perfecta para definir lo que he visto en H&M, y no sólo lo que he visto, también lo que he sentido yo misma. Estoy escribiendo felizmente con mi vestido nuevo, he conseguido el amarillo, me enamoré de él en cuanto lo vi no sé ya si en internet o en la tele, dehilachado por los bordes, con ese color tan potente y esa forma, es elegante pero a la vez no tienes la sensación de ir demasiado arreglada como una señora. Tenía que ser mío y aquí está en mi cuerpo...

150 €

Ha sido duro, no creáis que ha sido fácil, había un vestido de esos pero me estaba grande, estaba dispuesta a llevarme ese a pesar de la talla, cuando he visto a una chica que llevaba otro y no lo soltaba... Nos hemos mirado pero no hemos hecho nada, quizás tenía mi talla... He ido a ella después de un rato cuando la he vuelto a ver y justo, ella tenía un vestido de mi talla y yo llevaba uno de la suya, ninguna lo soltábamos por si las moscas, pero hemos hecho un buen cambio, cuando las cosas están predestinadas no hay obstáculos.

50 €

También he conseguido una falda beige con un drapeado o recogido muy chulo, queda muy rara, pero me queda bien y la sacaré un día que esté más atrevida. Además he pasado por Zara y he encontrado unos zapatos ideales para el nuevo vestido, y a estas alturas que ando con tacones como en una nube (bueno... dejémoslo en que los aguanto) no he dudado ni un segundo en incluirlos a la lista de mi tarjeta.

Por qué he llamado a este post "A la guerra por Lanvin", pues porque era la guerra, había vallas, guardias, chicas, incluida yo, luchando por los vestidos y muchas se han ido con las ganas de tener el vestido del que se habían enamorado, eso sí, se dejaban seducir por otro vestido de la colección para no perder cacho y porque no había tiempo ni de pensar, sólo tenías 15 minutos para comprar porque los guardias te echaban del recinto en el que estábamos confinadas, un estrés.

Lo de chico estaba genial. Super guapo, menos los pantalones de chandal con americana. Pero había una americana que me flipaba, ojalá encuentre una parecida en algún sitio que sea de chica.

60 €

Me encanta salir de compras y tener la sensación de haber hecho un buen negocio. Nada de sentirse culpable aunque elegante o vestida de mercadillo por no gastar (aunque de eso ya me preocupo cada vez menos). Es un gusto en todo caso aprovechar chollos y un Lanvin es un Lanvin, y a mí me encanta. Eso sí, tengo una queja... los vestidos de su colección oficial sí que son bonitos, ojalá hubiera hecho los mismo para H&M.

Mañana salgo y me voy a poner el vestido con los zapatos, estoy encantadísima. El peinado... quizás algo aniñado, con diadema, que tengo una que va que ni pintada con el vestido y el abrigo... ya veré.

Bueno, me despido chicos y chicas. Hasta mañana.